7 de enero de 2008

trois

hell hath no fury like a woman scorned

hoy lo comprobé de una forma macabra, en la persona de alguien más pero con todo lujo de detalles, lo observé entre libros cuyas páginas fueron arrancadas con rabia metódica, de forma tal que no pudieran, nunca, volver a ser leídos.
o sea, libros.
y como si no fuera suficiente, cuadros. arte, valioso por cierto; despojado de su aura para ser convertido en pedacitos de basura.

quizá en una galería de arte moderno, podremos decir que es una nueva instalación, algo como que contra benjamin.